es
Raquel Arbeteta

Te traeré a casa

Notify me when the book’s added
To read this book, upload an EPUB or FB2 file to Bookmate. How do I upload a book?
  • Ackerleyhas quoted14 minutes ago
    —Lyra.

    —¿Sí? —susurré también.

    —Llevas sola mucho tiempo.

    —Sí —respondí, aunque no fuera una pregunta.

    —Por eso tus canciones suenan así.

    —¿Qué quieres decir?

    —A que dejas espacio para que quien te escuche las cante contigo. —Antes de que pudiera comentar nada, se apresuró a continuar—: ¡No me refiero a que sean malas o estén incompletas! Son preciosas. Suenan preciosas. Solo que…

    —No necesitas aclarar nada. —Sonreí con resignación—. Aprendí a tocar acompañada. Es normal que parezca que les falta algo.

    —No les falta nada —murmuró Dikê con cariño. Vi su mano alzarse y moverse al mismo tiempo que ella; seguramente gesticulaba—. Es solo que no son solo algo que se escuche, ¿sabes qué quiero decir? Compartes la música, haces que quien te oye quiera también participar de lo que creas, dar algo a cambio, reaccionar… Dioses, me explico fatal.

    Aish

  • Ackerleyhas quoted41 minutes ago
    Sonreí sin que me viera. Dikê no era perfecta (eso me decía a mí misma, aunque me costase verle algún fallo).

    Aww, comprensible.

  • Ackerleyhas quoted18 hours ago
    —Sí —mentí—. Qué raro que no nos hayamos visto antes.

    —Es cierto. Me acordaría.

    Fue ella quien se sonrojó y no yo, pero sentí la misma calidez en las mejillas.

    Awww

  • Ackerleyhas quoted18 hours ago
    Pronunció esa amenaza con una expresión tan digna que no pude evitar echarme a reír. No parecía natural. Nada de lo que la rodeaba lo era. ¿Una chica amable que trabajaba para los Doce intentando ligar conmigo? Quizás sí que quería robarme.

    upsi

  • Ackerleyhas quoted18 hours ago
    «No existen las casualidades —solía decir mi madre—. Hay que crearlas».

    uhummm

  • Ackerleyhas quoted18 hours ago
    —¿Una mala noche?

    Dejé de cantar por la sorpresa y abrí los ojos. A contraluz, la chica parecía más alta y, su pelo, más rojo y antinatural, como si fuera un ser de otro mundo.

    —Eso parece —respondí. La entonces desconocida se fijó en la escasa recaudación que quedaba tras esconderme el resto en los bolsillos—. ¿Tienes alguna última petición?

    —La de siempre.

    Oy

  • Ackerleyhas quoted18 hours ago
    —Mucha suerte con tu música —susurró—. Aunque no sé si deseártela. Si tienes suerte, no podré pedirte otra canción cuando regrese de trabajar.

    —No lo sé —bufé mientras fingía hastío—. Hoy es uno de esos días en los que veo el casco medio vacío.

    Volvió a sonreír, así que la imité sin querer.

    Aw

fb2epub
Drag & drop your files (not more than 5 at once)