Todos los días me maravillo de que hayáis llegado a adultos.
—¿Temías que nos matáramos el uno al otro? —preguntó Gregory.
—No, temía mataros con mis propias manos.
Ailen Varahas quoted8 months ago
—Todos los días me maravillo de que hayáis llegado a adultos.
—¿Temías que nos matáramos el uno al otro? —preguntó Gregory.
—No, temía mataros con mis propias manos.
Ailen Varahas quoted8 months ago
—Anthony ha sido un buen padre para mí —dijo Gregory, porque sabía que ello alegraría a su madre, pero también porque era cierto.
Ailen Varahas quoted8 months ago
—Es usted insufrible.
Él la miró con aire travieso.
—Es una de mis mejores cualidades.
—¿Según quién?
—Bueno, a mi madre parezco gustarle bastante —contestó él con modestia.
Kandren Ayalohas quoted2 years ago
El amor existía.
Estaba justo allí, en el aire, en el viento, en el agua. Uno solo tenía que esperar.
Que buscarlo.
Y luchar por él.
Y él lo haría. Dios era su testigo: lo haría.
Kandren Ayalohas quoted2 years ago
—Nos pertenecemos el uno al otro —dijo él—. Para toda la eternidad.
Abbie'shas quoted3 years ago
—Tú no lo entiendes —dijo Lucy.
Pero los ojos de Hyacinth brillaban de furia.
—Eres débil —siseó—. No te mereces a mi hermano.
Antoniahas quoted3 years ago
Ahora, eran sus compañeras. Dos pequeñas palabras.
Te quiero.
Jamás estaría sin ellas.
Y eso era espléndido.
Antoniahas quoted3 years ago
El amor existía.
Estaba justo allí, en el aire, en el viento, en el agua. Uno solo tenía que esperar.
Que buscarlo.
Y luchar por él.
Antoniahas quoted3 years ago
También le gustaba tener una amiga íntima, claro, pero lo que más le gustaba era saber que había una persona que la prefería a ella por encima de todas las demás. Aquello le daba confianza en sí misma.