De camino a su trabajo en una sombrerería, Jane Ingleby trata de impedir que los contendientes de un duelo disparen sus armas. Distraído por la interrupción, Jocelyn Dudley, duque de Tresham, resulta herido de bala en una pierna.Tras el altercado, Jane llega tarde a la sombrerería y pierde su trabajo. Desesperada, decide pedirle al duque que le escriba una carta a su jefa en la que justifique su demora, pero, en vez de eso, Jocelyn le ofrece empleo como enfermera durante las tres semanas que durará su convalecencia. Para su sorpresa, Jane no se comporta como una criada, sino como una dama. Después de esas tres maravillosas semanas de convivencia, Jocelyn le pide a Jane que se quede a su lado.Sin embargo, la felicidad de los dos amantes se trunca cuando aparece en escena el conde Durbury, quien tiempo atrás había intentado sin éxito casar a Jane con su hijo.