La gaviota es una obra singular. En primer término por su asunto: es la historia del encuentro de dos adolescentes en una playa de la costa mexicana. Las historias de adolescentes no abundan en las literaturas hispánicas. No se ha reparado bastante en la sequedad y rigidez de nuestros clásicos: el adolescente típico de las novelas españolas no es un Dedalus, un Gran Meaulnes, un Werther o un Tom Sawyer sino un Lazarillo de Tormes o un Guzmán de Alfarache. Un antihéroe, un pícaro. Calixto y Melibea podrían ser la excepción pero los dos ya están hechos y formados cuando se enamoran: no se descubren a sí mismos al descubrir el amor.