Juan Manuel Vásquez es el más pequeño, más flaco y más pobre entre los alumnos que están ingresando al Colegio de San Bartolomé. Sus compañeros y profesores se escudan en su figura de 'garabato' para humillarlo constantemente. La hostilidad que experimenta en la ciudad se compensa con el refugio que le ofrece el entorno rural. Esta narración recoge muchos elementos autobiográficos de la infancia del autor durante el comienzo del siglo XX en Bogotá.