Tras un análisis minucioso, se descubre que esta “pantalla terminológica” no es un reflejo de la realidad, sino una desviación de ella.[4] La noción de “underclass” surgió como un protoconcepto al estilo de Robert K. Merton (1984: 267), es decir, “una idea primitiva, especificada de manera rudimentaria y, en gran medida, carente de explicación”, pero pronto se transformó en un instrumento de acusación pública y disciplinamiento simbólico contra el amenazador precariado[5] negro del hipergueto, esa novedosa constelación socioespacial que emergió de los escombros del gueto comunitario propio de la era fordista (Wacquant, 2008: caps. 2-4)