Giuseppe Mascheroni

Para un local para piscina de tamaño medio, es decir, de aproximadamente 110 m² con una piscina de 10 x 5 m, se tendrá que disponer una instalación dotada de algunos componentes fundamentales

El revestimiento de esta instalación todavía en construcción es de lona de PVC reforzada y estampada con un motivo tipo mosaico.

Todas las piscinas enterradas, realizadas tanto en obra con hormigón armado como con paneles de hormigón o metálicos prefabricados, necesitan dos operaciones: la ejecución de la excavación y el drenaje del terreno.

de esta forma se garantiza una menor incidencia en el asentamiento natural del terreno removido.

Un terreno de consistencia problemática, con agua en el subsuelo y muy compacto o rocoso, o de escasa consistencia, puede hacer elevar los costes de la excavación hasta el triple del precio medio referido a las condiciones operativas óptimas.

En definitiva, pueden verificarse casos en que los costes de la excavación inciden en la mitad o más sobre el coste final de la piscina.

En cambio, en presencia de desniveles será oportuno crear una adecuada red de drenaje para alejar la humedad de la estructura de la piscina, eliminando el riesgo de infiltraciones o humedades que intervendrían de forma negativa en la estructura limitando la duración en el tiempo.

La estructura de drenaje consiste en trincheras de profundidad variable oportunamente rellenadas con piedras y grava. Estos conductos recogen el agua del terreno y la alejan de la estructura que se tiene la intención de preservar.

Con el mismo objetivo se prefiere realizar alrededor de la piscina una pavimentación de superficie igual a la del espejo de agua, limitando de esta forma la penetración directa de lluvia en el terreno, manteniendo el terreno lo más inalterado posible en la estructura y limitando los posibles movimientos de asentamiento.

En algunos casos estos detalles pueden no resultar suficientes para garantizar una adecuada seguridad a la piscina; se puede prever la creación de una excavación cuesta arriba de la piscina, con el correspondiente muro de contención, para interceptar de forma más eficaz el agua que desciende al valle.